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Andrés Gonzalo Íñiguez Díaz -Psicólogo de la Salud y del Deporte.
Se aproxima el último partido de liga del Racing de Ferrol en A Malata ante un rival que se juega el liderato y el equipo departamental el todo por el todo, donde ganar y esperar resultados negativos de Toledo y Coruxo le posibilitaría jugar el play-out para mantener la categoría.
A partir de estas condiciones y a pesar del escaso margen de tiempo, ¿Qué variables influirían en la optimización del rendimiento de cara al afrontamiento de este partido? Una de ellas es el control del estrés del futbolista. Para ello se precisa aceptar la situación y demostrar lo entrenado compitiendo bajo presión, una preocupación que suelen tener los entrenadores que aunque suelen reconocer la gran importancia de las habilidades psicológicas de cara a la competición, dudan de la aportación que puedan ofrecerle los psicólogos del Deporte a pesar del éxito aportados a los equipos que, cada vez más, van introduciendo esta disciplina en su equipo técnico o médico.
¿Se puede trabajar la presión y habituarse a ella? La respuesta es afirmativa. Si entrenas con anterioridad y aprendes la práctica demuestra la habituación, aunque eso sí, se requiere de tiempo y aquí mucho no queda. Para eso lo idóneo es trabajar y entrenar en formas similares a las de la competición todas las variables posibles que pueden darse en un partido como el que se juega el próximo fin de semana.
Fundamental y a tener en cuenta es la elección de las posibles cargas psicológicas como el tiempo, el factor ambiental, condiciones biológicas, el resultado o el factor sorpresa. A modo de ejemplo y sin ánimo de ser exhaustivo, entrenar ejercicios partiendo de situaciones ventajosas o prolongar el tiempo con un marcaje férreo o un arbitraje en contra, intentar marcar un gol en diez segundos o defender un resultado cuando quedan cinco minutos, son situaciones muy estresantes a trabajar ya que si el equipo tiene baja confianza hasta un resultado positivo puede ser fuente de estrés con el desencadenante de que los jugadores pueden no creerse que van a conseguir la victoria. Destacar la importancia de la necesidad de abordar el molde mental de anticipación aversiva, generador de ansiedad, situarse en el aquí y en el ahora, comprometerse, trabajar bajo presión los primeros días de la semana, para luego autorregular y compensar los niveles de activación con técnicas de relajación y poder conseguir así unos niveles óptimos del rendimiento.
En la psicología del deporte decimos que el querer es poder siempre y cuando lo que trabajes dependa sólo de ti. Valentía, trabajo y suerte al Racing para afrontar este decisivo partido de liga.
