Diez razones por las que Narón necesita mejorar (y II)‏

miguel angel pazosMiguel Ángel Pazos (*)

Continuando con «las diez  razones por las que Narón necesita mejorar»

Guarderías. El caso de las guarderías naronesas tapa, bajo aires triunfalistas del gobierno, otro auténtico malgasto de recursos públicos de Narón que sus 40 mil habitantes pagan, muchos de ellos sin saberlo. La primera de las guarderías sí la pagó el Ayuntamiento, pero a partir de ahí, la Xunta y la Diputación comenzaron a costear el resto de las guarderías, hasta la última, que ha sido pagada con fondos FEDER. Al margen de eso, merece una mención aparte el tema de la guardería de Xuvia, donde estaba previsto que abriera este año, y no podrá hacerlo debido a los incumplimientos del alcalde, teniendo que asumir su gestión la Xunta, aun cuando no le correspondía por principio.

Cultura. Detrás del relativo éxito del sector cultural en Narón se esconde un auténtico pozo de dinero como es el Padroado da Cultura, un ente con presupuesto propio al que, por si fuera poco, se le dota de más fondos todavía desde el pleno del Concello. Un ente bajo el que se esconde un Pazo da Cultura que terminó costando a todos los naroneses más de 15 millones de euros, cuando solamente estaban presupuestados 6. Al margen del dinamismo cultural que se le pueda dar, vendría bien también una evaluación de qué tipo de obras y representaciones tienen éxito y a cuales no acuden al acto, para no gastar inadecuadamente dinero de los naroneses en un pozo sin fondo.

Zonas verdes. Si presumir de algo en lo que se suspende fuera positivo, tendríamos al mejor alcalde de la historia. Las zonas verdes de Narón se reducen a un parque fluvial en Freixeiro, realmente mejorable y abandonado, que ni siquiera vale para que los animales y sus dueños puedan pasear a gusto, y a Aldea Nova, un auténtico deshecho económico que bajo la tutela del Concello ha tirado a la basura cerca de 100 mil euros solamente en el último año para indemnizar a la empresa que lo gestionó , por el cual trabajadores también han denunciado impagos de su sueldo y abandono de los animales, que han rozado el maltrato animal por su inanición.

Turismo. A la concejala de Turismo, María Porto, se le llena la boca hablando de su concejalía, la cual no hace absolutamente nada por el turismo de Narón, al margen de acudir a hacerse la foto e irse, demostrando lo poco que le interesan las actividades que los vecinos hacen para propagar la marca de Narón por la comarca y el resto de Galicia. Lo cierto es que la apuesta de su concejalía por el Turismo se resume en la gestión que hicieron este año del Oenach, una fiesta declarada de interés turístico por la Xunta, para la que solamente concedieron 9.000 euros, mientras que para dotar de más fondos a “la Cultura en Narón” (al margen del Padroado), ofrecieron 20 mil euros solamente en el último pleno. Es, por tanto, una cuestión de prioridades, en la que el gobierno local no pone al turismo como una de esas prioridades.

Asociacionismo. Existe una red de asociacionismo, muchas veces maltratada, y en algunas ocasiones mal enfocada. Con el sector joven del que dispone Narón se podría hacer más en el sector del asociacionismo juvenil, aprovechando planes que vienen de la Xunta como la Iniciativa Xove que el Ayuntamiento no encarga ni de explicar ni de fomentar, por lo que para Narón no existe nada al respecto.

Servicios Sociales. Narón, al albor de la construcción urbanística, se dotó de unos servicios y obras faraónicas que ahora le cuesta mantener y pagar, por lo que es habitual ver al alcalde llorando a otras administraciones para que le paguen sus errores. Unos errores de los que, aunque no fuera alcalde, no le pueden ser ajenos, dado su pasado como concejal de urbanismo.

¿Motor económico de la comarca? Aunque el Ayuntamiento quiera venderse como el motor económico de la comarca, lo cierto es que ha crecido, como ya hemos dicho, al albor de la industria ferrolana que languidece, por lo que el el paro se ha disparado más que en otros municipios con sectores económicos más dinamizados. Queda, por tanto, como reto del futuro diversificar Narón como parte de la comarca para, ahora sí, hacer de ella un pilar en el que se fundamente nuestra mancomunidad, y no ser el vecino moroso que adeuda a todo el mundo debido a los errores de unos pésimos gestores que llevan 30 años instalados en el Concello.

(*)-Es presidente de NN-XX. de Narón

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