Neda demanda la ayuda de la Xunta de Galicia para completar el saneamiento de la ría de Ferrol

Instante de la rueda de prensa | Adán Puentes

Hace unos días la Xunta de Galicia anunciaba que en el mes de noviembre estará completadas las obras de saneamiento en la ría de Ferrol, pero este martes el Concello de Neda ha salido al paso de esta afirmación, en una rueda de prensa con la presencia del alcalde Ángel Alvariño, acompañado de la teniente de alcalde Ana Rosa Pena y de la concejala de Servicios Sociales, Ángeles Puentes.

Ángel Alvariño afirmaba que Neda dispone desde hace treinta años “de una depuradora propia”, la cual está en funcionamiento pero arrastra problemas importantes desde su puesta en marcha, al realizar la red por el lecho del río con fibrocemento “teniendo filtraciones”, lo que ha supuesto que desde hace tres años Augas de Galicia esté multando al Concello de Neda con sanciones entre los 2.000 y 2.500 euros “siendo estas sanciones cada vez más reiterativas.” Algunas de estas sanciones todavía no se han abonado, porque el consistorio las ha recurrido.

El alcalde de Neda criticaba que su localidad quedase excluida en el año 2012 de la construcción de los colectores de la ría “quedándose zonas fuera de la red de saneamiento”, como es la zona del Pazo da Merced, el cual está queriendo solucionar el Concello de Neda con un proyecto propio para conectar Xubia con el río Basteiro y que tiene una estimación presupuestaria de dos millones de euros, siendo un problema para el Concello de Neda “por las limitaciones por la regla de gasto de la Ley Montoro”, a pesar de contar actualmente con 750.000 euros en remanentes y no disponer de deuda municipal “pero no podemos invertir este dinero.”

Desde el Concello de Neda se han mantenido en todo este tiempo reuniones con Augas de Galicia “donde el anterior director quiso resolver este problema y se ha quedado en nada”, afirmaba Ángel Alvariño. Si se corrigieran estos errores, además de algunas filtraciones que hay en el río Belelle “quedaría todo subsanado”, siendo este un problema de calado para el Concello de Neda ya que la aportación económica que pueden hacer “es pequeña” debido a que en la actualidad son 5.000 habitantes y no tienen “la capacidad económica de otros ayuntamientos”. Ángel Alvariño esperaba que, una vez que los nuevos técnicos de Augas de Galicia tomen posesión de sus cargos, poder mantener una nueva reunión “para dar una solución a este tema”, porque casi todos los días reciben informes de Augas de Galicia notificándoles vertidos “pero no nos dan ninguna solución.”

Al mismo tiempo, Ángel Alvariño reconocía estar en conversaciones con el Concello de Fene para que la zona de O Puntal pueda conectarse a la red fenesa “para que pueda ser más barato.”

Contrato del servicio de recogida de sólidos urbanos

Otro de los problemas que también tiene el Concello de Neda era el contrato del servicio de recogida de sólidos urbanos, en un problema importante para localidad ya que el último contrato venció en 1999 y desde aquella está prorrogado.

La intención de Ángel Alvariño y de su equipo de gobierno cuando llegaron a la alcaldía era la de remunicipalizar el servicio, pero los servicios jurídicos del Concello de Neda le notificaron que “era imposible a nivel legal”, por lo que la siguiente opción era que este contrato lo asumiera la Mancomunidade de Concellos, conjuntamente con Ferrol y Narón, pero el consistorio ferrolano declinó formar parte, por lo que el Concello de Neda apurará ahora la licitación para sacarlo adelante, con un contrato de un millón de euros para los próximos cinco o diez años.

En la actualidad la empresa que presta el servicio solo aporta el personal, siendo el Concello de Neda los que aportan los vehículos, con una antigüedad muy elevada “y con un gasto de 70.000 euros anuales en reparaciones.

Otro problema del que Neda no es ajeno es el incivismo de algunos ciudadanos, con la proliferación de vertidos incontrolados, donde el consistorio ya ha identificado a varios vecinos, en un problema que supone a las arcas municipales un gasto de 90.000 euros anuales a mayores.

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