Ferrolanos en la diáspora II. Disertaciones marítimo-poéticas del almirante Sande en Sevilla

maria-fidalgo-aMaría Fidalgo Casares. Doctora en Historia

Este jueves, día 5,  víspera de la Constitución, mientras que gran parte de la península estaba aterida de frío disfrutábamos a 18 grados de temperatura de las disertaciones marítimo-poéticas del Almirante eumés José Ángel Sande Cortizo en la capital hispalense en el regio marco del Real Círculo de Labradores. Los que han tenido la oportunidad de oírle en alguna ocasión, pueden corroborar que es una experiencia inolvidable porque se sale de los cánones al uso de lo que puede esperarse de una conferencia de tema naval. Podría incluso aventurar que Sande es el creador de un nuevo género en el mundo de las conferencias, ya que a la vez que expone los conocimientos del tema en cuestión, sintetiza diferentes parcelas artísticas en sus exposiciones que las singularizan y las hacen tremendamente originales. Invitan a la reflexión y a que el espectador saque sus propias conclusiones, algo que ya advierte el propio conferenciante en sus palabras iniciales.

(Almirante Sande con el CN Sagredo)
(Almirante Sande con el CN Sagredo)

Esa noche sevillana bajo el geográfico epígrafe de: La Mar, factores diferenciantes y condicionantes, asistimos a una ponencia que combinaba los datos objetivos propios del tema con una exposición dramatizada de raigambre poética, acompañada de fotografías artísticas y de una cuidada selección de marinas. La tarde comenzó con la presentación del Capitán de Navío López de Sagredo, Marqués de Castellón y actual Presidente del Real Círculo de Labradores. No pudo ser objetivo en su presentación, ya que todas las palabras que le dedicó mostraban sin ambages un afecto enorme hacia la figura del presentado. Con modestia, Sande pidió que no se expusiera su destacado currículum. Sagredo no se explayó, pero sí quiso contar algunas anécdotas y destacar su calidad de experto en infraestructuras y su valor como persona. Le dedicó elogiosas palabras como que “Acumula el triple de neuronas trabajadas que el resto de los mortales”, “Poseedor de un inmenso culturón” y la que más me gustó «, haciendo alusión a los jabalíes del escudo de Pontedeume.

Habló de su juventud compartida en Marín y recordó cuando el joven eumés, número uno de su promoción, fue nombrado brigadier general (- brigadier de brigadieres-) y destacó el respeto del que gozaba en el Escuela Naval, un respeto y hasta “miedo reverencial” que posteriormente su íntimo amigo el militar y Doctor De la Vega, que acudió desde Sanlucar al evento, calificaría como auctóritas… También fue muy curiosa la anécdota de la celebración de la despedida de Sande del patrullero “Marola” cuando con jolgorio y brindando efusivamente por los momentos compartidos se produjo el golpe de estado del 23 de Febrero y Sande tuvo que llamar a la moderación porque la confusión entre el jolgorio del momento con la celebración del golpe les podría salir cara… Llegado el momento de la disertación del ponente, Sande la estructuró en tres bloques temáticos, partiendo de la consideración del hombre y la mar ( “amante enemiga” ) como las dos fuerzas más poderosas de la creación, los factores físicos y humanos que influyen en el poder naval y otras consideraciones para la reflexión.

(El conferenciante con el CN Sagredo y el matrimonio De la Vega)
(El conferenciante con el CN Sagredo y el matrimonio De la Vega)

Lo curioso de estos bloques es que independientemente del aspecto abordado alternaban la parte estadística, con tipografía de diferentes tipos y tamaños, cartografía, espectaculares fotografías de tormentas y noches en el mar bajo la luna, y marinas británicas… Junto a la salinidad o al tráfico mercante transpacífico, citas a teóricos de la Historia como Toynbee, A T Maham, filósofos como Sócrates o poetas como Pessoa o Baudelaire

Salpicó toda su intervención con herméticas expresiones naúticas sólo para iniciados, como concesión a sus compañeros presentes y a su propia filiación, mostrando en todo momento su dominio absoluto del arte de la oratoria. Haciendo exhibición de una memoria prodigiosa, que podría calificarse de ostentosa, ya que en hora y media de comparecencia no leyó una sola línea, cerró su intervención con la conocida poesía del poeta granadino Benítez Carrasco “ La Barca”, detalle a sus anfitriones andaluces y al tema tratado. El poema se recrea en la comparativa entre una mujer, una barca y el gran valor que tiene para su propietario. Este pequeño recital dio lugar a uno de los momentos estelares de la noche. Su dominio de los matices de la voz llegó a su cenit.

(Entrega de un recuerdo al A. Sande)
(Entrega de un recuerdo al A. Sande)

Autoridades militares en activo como el Vicealmirante de la Flota el ferrolano Rodríguez Garat y otros amigos acompañaron al eumés en esta inolvidable disertación. Eché un poco de menos en esta exposición sevillana el uso de los silencios, algo dificilísimo que Sande maneja como nadie… pero eso debe reservarlo para temas más líricos y para su patria chica, Pontedeume donde cuando diserta sobre lo divino y lo humano, con gratos recuerdos para el poeta universal Ramiro Fonte, nacido en la villa, emociona a la gente hasta las lágrimas. Ante mi petición insistente al Presidente del Círculo de que vinieran más ferrolanos a la ciudad, me contestó que tendría que ser más adelante ya que “se le veía el plumero con tanto marino”… Lástima…. aún así, creo que lo hará… este marqués, al igual que su esposa María Eugenia, dejaron parte de su corazón en Ferrol, de hecho cerró el acto narrando un vendaval que azotó su barco de recreo en la ría de Ares… Pese a tanta sensibilidad y la exhibición de una naturaleza claramente romántica, el eumés es un hombre reservado y muy controlador de sus emociones. Aún así, dejó traslucir una profunda nostalgia cuando confesó que le había encantado venir, aunque fuera sólo por la oportunidad de volver a vestir el uniforme. Y en ese momento, al ver a Sande en el estrado con su barba blanca y su regio uniforme de Almirante, tan perfecto que parecía su segunda piel, recordé aquellas palabras que mi padre Manuel Luis Fidalgo escribió allá por los años cuarenta en una de las primeras exposiciones de Abelardo Miguel… “ Sus rostros marineros no son reflejo del carácter, sino de la profesión…”. Y sí, el Almirante Sande puede que ya no esté en activo, pero sigue llevando el mar, en su voz, en su rostro y su pasión, tal y como nos demostró en su inolvidable conferencia del Real Círculo de Labradores.

 

 

Lea también

Noites craras do luar-Antes de pedir reprobaciones…mírense al espejo

José Luis Álvarez Con la benevolencia del director de Galicia Ártabra reanudo mis comentarios de …