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El PP de Narón ha pedido en la mañana de este martes, día 17, en la sesión ordinaria de la comisión municipal de asuntos sociales, la dimisión inmediata de la concejala de Ensino e Bibliotecas, María del Carmen Espada, por intentar utilizar a menores de edad para dar difusión a la actuación del gobierno local que preside José Manuel Blanco (TEGA) respecto de las obras a realizar en el CEIP Ponte de Xuvia.
“No hay manera de mentir más rastrera que no decir toda la verdad, y la concejala no solo entregó una supuesta información que no cuenta la verdad íntegra, sino que pretendió difundirla a través de los escolares del colegio”, afirma el portavoz popular, Miguel de Santiago. “Se ha saltado el conducto oficial de comunicación con los padres y su actuación es, desde luego, contraria a la ética y constituye una violación flagrante de las normas de los centros educativos”, añade.
De Santiago considera “gravísimos” estos hechos, más aún al provenir de la responsable de la Concejalía de Educación. “Siendo titulada en Magisterio se le suponen conocimientos de pedagogía y ética con los niños, pero está claro que esta persona no puede seguir al frente de una responsabilidad que no sabe ejercer. Ha antepuesto los intereses políticos de su partido a la protección de los menores de edad”, señala.
No son estos, sin embargo, los únicos hechos por los que el PP pide la dimisión de María del Carmen Espada dado que, este lunes, día 16, en el Consejo Escolar Municipal y en presencia del resto de la comunidad educativa de Narón, “la concejala, en una cruzada manipuladora, carente de escrúpulos y con una falta de ética inadmisible en un cargo público, se permitió el exceso de criticar con dureza el comportamiento del director del colegio Ponte de Xuvia por no difundir la carta del alcalde entre los alumnos y sin que este pudiera defenderse al no estar presente”.
El portavoz popular recuerda a Espada y al resto del gobierno local que el director “solo cumplió escrupulosamente con la legalidad”. “Lo que hizo como responsable del centro fue proteger a los alumnos de la utilización que Blanco pretendía hacer de ellos”, afirma.
